El sistema que da prioridad a los autobuses en los cruces semafóricos reduce en 104 toneladas la emisión de CO2
El Ayuntamiento de Elche ha reducido en el último año un 10% el consumo de combustible de los autobuses urbanos gracias al proyecto "E-Bus", un programa instalado en los cruces semafóricos y que permite dar prioridad a la circulación de los autobuses.
Según el informe realizado por la Concejalía de Transportes, el plan ha facilitado la reducción del tiempo del recorrido de los autobuses y ha supuesto una "mejora del confort del viaje, reduciendo frenadas y arranques, ya que el conductor tiene información visual de cuándo va a cambiar el semáforo y regula su velocidad sin necesidad de detenerse e iniciar después la marcha", indica el documento, en el que también se hace mención a que la medida ha permitido reducir las emisiones de CO2 en 104 toneladas anuales. "También hemos conseguido un ahorro de 360.000 euros porque se han reducido dos autobuses en las líneas D y B, pero manteniendo la frecuencia de paso", explicó el concejal de Transportes, Antonio Amorós.
El proyecto "E-Bus" ha supuesto una inversión de 100.000 euros por línea y con la misma se ha actuado en un total de 62 cruces semafóricos de la ciudad, concretamente en los que afectan a las líneas D (Carrús, Altabix, Hospital) y B (Toscar-El Pla-Hospital). Según los datos que maneja el Ayuntamiento, los viajeros anuales de la línea B se sitúan en 2.160.000 usuarios, mientras que en a línea D los pasajeros del pasado año fueron 1.920.000. "Nos sentimos muy satisfechos del servicio que se da a la ciudadanía y queremos seguir mejorando el servicio de autobuses para que el ciudadano disfrute de la máxima calidad con un fuerte compromiso medioambiental por parte del Consistorio", manifestó Antonio Amorós.
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